... abajo, en el parque, miraba al balcón cerrado del tocador de la Regenta, don Víctor, pálido y ojeroso, como si saliera de una orgía; daba pataditas en el suelo para sacudir el frío y decía a Frígilis ...
... ómo cambia un hombre en la dura vida de campaña en el Chaco... está flaco, ojeroso, peludo y deprimido, como todos nosotros». Repitió esta estrategia fotográfica consigo mismo después de soportar ...
... bien porque en ocasiones siguen a los barcos con la esperanza de comer desechos o sobras.El albatros ojeroso, Diomedea melanophris, tiene la parte superior de las alas de color obscuro y la parte ...
... obscuro en los bordes del ovalado rostro; vi detrás al hermano, más pálido y ojeroso, menos interesante que el primogénito. Ambos, al entrar en la Comandancia, pasaron rozando conmigo: observé ...
... de pasar una mala noche. Atribuía a este cambio atmosférico la excitación de sus nervios. Su rostro ojeroso y afilado, de intensa palidez, revelaba las horas de insomnio. El mistral venía a aumentar ...
... & 243;n, y don Pablo que la presid& 237;a, el infeliz D. Pablo, escu& 225;lido, ojeroso, amarillo, tr& 233;mulo, parec& 237;a haber salido de la sepultura y esperar el canto del gallo para volverse ...
... avisada Elvira topó un día con su antiguo novio, el loco y doliente Juan, el joven ojeroso y pálido, a quien más de una vez sorprendió paseando sus melancolías por las umbrías del Retiro. Y quedó ...
... , añadía: «Es un trabajador eminentemente eficaz, de dotes destacadísimas y lealtad sobresaliente». Aun ojeroso y semidormido, el doctor Kafka resolvía cualquier problema y era, además, el brazo ...
... cara de espital.En efecto; Pluma, sin duda a consecuencia de sus desastrosos amores, estaba tan pálido y ojeroso que daba compasión. -No soples fuerte, Monifacia, que va a echar a volar ese caballero ...
... del ex-regente que Edelmira y Paco habían escondido. Don Saturnino Bermúdez, pálido y ojeroso, con una sonrisa cortés que le llegaba de oreja a oreja, venía detrás, solo, también hecho un loquillo ...
... estancia con las ropas bien h& 250;medas, el pelo mojado, las botas de potro salpicadas de barro, ojeroso y somnoliento. Ard& 237;a un buen fuego. Felisa, madrugadora como el gallo criollo que cantaba ...
... se puso en el cigarral, donde encontró al amo arrimado al añoso tronco de un olivo, ojeroso, pálido y meditabundo. Mientras el monaguillo, apoderándose de la burra, cabalgaba por aquellos campos ...
... todas sus fuerzas contra aquella inactividad involuntaria.A la hora del desayuno lo encontré fatigado y ojeroso, con un toque de color febril en las mejillas.––Se está usted destrozando, amigo ...
... estancia con las ropas bien h& 250;medas, el pelo mojado, las botas de potro salpicadas de barro, ojeroso y somnoliento. Ard& 237;a un buen fuego. Felisa, madrugadora como el gallo criollo que cantaba ...
... rasgos, que su fresca fisonomía, de sana y caliente palidez, se había convertido en un rostro ojeroso, deshecho, un cuerpo agitado por escalofríos y espasmos, de esos que llaman muerte chiquita ...
... , acompañado de un ronquido o silbo a manera de estertor. Su rostro estaba demudado y más pálido y ojeroso que ordinariamente. Ramón, con todo, tal respeto tenía a las órdenes que su amo le daba ...
... cara de espital.En efecto; Pluma, sin duda a consecuencia de sus desastrosos amores, estaba tan pálido y ojeroso que daba compasión. -No soples fuerte, Monifacia, que va a echar a volar ese caballero ...
... se puso en el cigarral, donde encontró al amo arrimado al añoso tronco de un olivo, ojeroso, pálido y meditabundo. Mientras el monaguillo, apoderándose de la burra, cabalgaba por aquellos campos ...
... . No hay nada que no seas capaz de hacer, con tu maravillosa belleza. -Pero supongamos, Harry, que me volviera ojeroso y viejo y me llenara de arrugas. ¿Qué sucedería entonces?-Ah -dijo lord Henry ...
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