(Cartagena, Murcia, h. 550 – Écija, Sevilla, h. 620). Obispo de Écija y santo. Hermano de los santos Leandro, Isidoro y Fiorentina. Tras la invasión de las costas de Levante y Andalucía por los bizantinos en 552, su familia abandonó Cartagena y se trasladó a Sevilla. Después de la muerte de su padre, Leandro, como nuevo cabeza de familia, envió a Fulgencio de nuevo a Cartagena para hacerse cargo de las propiedades familiares. Nada se sabe sobre él hasta que en X-610 firmó como obispo de Astigi (Écija) la declaración conjunta de Gundemaro (610-612) y diecinueve obispos en que, como consecuencia de los acuerdos adoptados en el sínodo celebrado en 23-X-610, se afirmaba la indivisibilidad de la provincia cartaginense y la primacía metropolitana de la sede de Toledo; en el II Concilio de Sevilla (619), reclamó una basílica ubicada en el límite entre su diócesis y la de Córdoba, y atendió las peticiones del obispo de Málaga sobre unas parroquias pertenecientes a la...