También inquisidor o visitador del reino. Oficial real nombrado en situaciones de emergencia e investido de poderes excepcionales como lugarteniente del monarca. Se trata de una figura característica del s. XIV y de algunos reinos hispanos que, como los de Mallorca y Navarra, mantenían un especial régimen de soberanía por su situación geográfica respecto a la metrópoli. El cargo solía estar ocupado por clérigos o caballeros de la máxima confianza del rey que, mientras en el caso de Mallorca, actuaban individualmente, en el de Navarra, formaban equipos de dos a siete miembros. Sus elevadas atribuciones incluían sustituir o suspender en sus funciones al gobernador, especialmente a aquel que, designado por el anterior monarca, aún permanecía al comienzo de un nuevo reinado. Ambos, reformador y gobernador, coexistían a menudo con idénticas facultades y dictaban conjuntamente sus órdenes, siendo el primero quien, en caso de sustitución, solía ocupar el puesto del...