También Tribunal de la Sangre. Organismo judicial instaurado por Fernando Álvarez de Toledo y Pimentel, III duque de Alba, en los Países Bajos, el 5-IX-1567, para depurar las responsabilidades por la rebelión acaecida en 1566 y reprimir la disidencia confesional y política contra el catolicismo y el dominio español. El Tribunal reprimió no sólo a la disidencia protestante y a las capas populares que se habían alzado contra el dominio español, sino también a la nobleza católica, crítica entonces con un Felipe II de España (1556-1598) que estaba erosionando sus privilegios. Aunque formaban parte del Tribunal cinco magistrados flamencos, sus auténticos dirigentes fueron españoles y el III duque de Alba se encargó personalmente de dominarlo para controlar una represión que fue durísima: se dictaron unas doce mil condenas y más de mil cien penas de muerte durante los seis años en que funcionó. El proceso más conocido y criticado instruido por el Tribunal fue la...