Historia El encaje Valenciennes tiene su origen en la villa de Valenciennes, al norte de Francia, y empezó a producirse durante el siglo XVI. Fue uno de los encajes más valorados y reconocidos en Europa desde entonces, especialmente durante los siglos XVII y XVIII por su finura y calidad. Tradicionalmente se confeccionaba a mano mediante la técnica del bolillo, combinando el fondo y los dibujos simultáneamente con el mismo hilo, sin doblar ni empalmar, resultando en un encaje uniforme sin refuerzos visibles.