La mano feliz

ESCENA PRIMERA

(Un cuadro estático.) El Hombre se halla postrado en la obscuridad con la cara vuelta contra el suelo y los dientes clavados en el cuello de un monstruo, una especie de «fiera mítica». A través de pequeños orificios, seis hombres y seis mujeres, con las caras coloreadas de verde, le miran y cumplen la función de un coro antiguo. Mediante una mezcla notable de canto y Sprechgesan, el coro se dirige al Hombre y le pregunta cuánto tiempo pasará buscando la felicidad en la tierra si, de hecho, tendría que creer en otra verdad más elevada.

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información