... llegado hasta nosotros dos relieves académicos, San Lucas predicando y Jesucristo entregando las llaves del Paraíso a San Pedro, ambos conservados en el Museo de Bellas Artes de Valencia, que revelan ...
... , etc.—. Con posterioridad, en su carrera sobre las tablas se encuentran títulos como La vieja señorita del paraíso (Antonio Gala), El cementerio de los pájaros (Jacinto Benavente, 1982, nominación ...
Organismo público de radiodifusión, dependiente del Estado, creado en 1973 tras la fusión de Televisión Española y Radio Nacional de España. Radiotelevisión EspañolaLa que ...
... . Está escrito en endecasílabos blancos y analiza, a través de su infancia y juventud, la pérdida del paraíso. Su segundo libro fue Palabras a la oscuridad (1966). En esta obra, más honda y madura ...
... del siglo XVIII, o a principios del XIX. Dice, literalmente:«Si un hombre atravesara el Paraíso en un sueño, y le dieran una flor como prueba de que había estado allí, y si al despertar encontrara ...
... . Donde él se desarrolla, desaparece lo bello y se borra lo bueno. En efecto, el encantador paraíso de las rosas quedó para siempre desierto. Todos los lindos arbustos perecieron.No creáis que ocurre ...
Aunque se viese sustentada por la pasión popular, la Reforma protestante no nació en el seno del pueblo, sino entre las gentes de Iglesia, escandalizadas ante la degradación de la fe. La Reforma ...
... extranjeros, sobre todo los estadounidenses (hoy puede calificarse a Indonesia de verdadero «paraíso» de las multinacionales); la permanencia de la habitual bipolaridad colonial entre la agricultura ...
... la entrada aquí. Será una gracia muy grande de nuestro Señor, si me admiten en el Paraíso. -¿Y cómo fue que te marchaste del mundo? -siguió preguntando él, sólo por decir algo, pues al hombre ...
En lo que respecta a los Mamíferos, podría definirse el Continente Australiano, como el Continente de los Marsupiales.Canguros rojos (Macropus rufus), es una especie de marsupial diprotodonto de la ...
... llevó el corazón de plomo y el pájaro muerto. -Has elegido bien -dijo Dios-. En mi jardín del Paraíso este pajarillo cantará eternamente, y en mi ciudad de oro el Príncipe Feliz repetirá mis alabanzas ...
... de apogeo en las grandes pelucas del tiempo de Luis XIV. El S. XVIII será el paraíso del peluquero; la «cabecita» rizada y empolvada bajo Luis XV, embadurnada de pomada con el fin de mantener ...
... » (1935), «Mundo a solas» (1950, pero escrito antes de la guerra civil) y «Sombra del Paraíso» (1944), poseen la madurez y el autodominio necesarios para convertir su vivida imaginación poética ...
... . Después del incendio de Roma, creó en el corazón de la ciudad, al pie del Palatino, un «paraíso oriental»: un verdadero parque con un lago y animales salvajes y, en su centro, una vivienda ...
... en su subsuelo petróleo, cuyo descubrimiento y cuya explotación acarrean el fin de este paraíso metafísico y la dispersión de los adeptos de la «religión» que en él se practica.• David Herbert ...
... como que comenzará el reino de la eternidad (el universo quedará absorbido por el paraíso y viviremos en la Jerusalén celestial), etc. El destino del mundo es único, como lo es el de cada individuo ...
Si, como decía Michelet, el hombre es peregrino por naturaleza, en la Edad Media lo fue más que en ningún otro tiempo. Desde el final del Imperio romano, las poblaciones estuvieron en movimiento sin ...
... través de los siglos a mis venas,atravesando corazones, penas...por un túnel de sueños y de sienes.Allá en el paraíso conocisteel gran rostro de Dios, su poderío.Saliste de sus manos como un ríoy ...
... Araucana, del español Ercilla, 1569-1589). A veces, el designio es glorificar una religión (El Paraíso perdido, del inglés Milton, 1667; La Mesíada, del alemán Klopstock, 1748-1777). Contrariamente ...
Con el desarrollo de las ciudades se va afirmando paulatinamente el florecimiento intelectual de la Edad Media. En la época anterior, se practicaban de buen grado varios oficios al mismo tiempo, ...
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